martes, 22 de mayo de 2012

¿Cómo ejerces tu sexualidad?


¿Cómo ejercer responsablemente mi sexualidad?

- La edad promedio en la que los adolescentes inician su vida sexual es entre los 15 y 17 años.
- En tu país, en el año 2000 se registraron 179 mil 413 adolescentes entre 15 y 17 años de edad, con al menos un hijo, y en 2005 se registraron 164 mil 108.
-La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSyN) 2006 reportó que la tasa de embarazo adolescente de entre 12 y 19 años es de 79 por cada mil y existen estimaciones  de que entre el 30 y 60% de embarazos, terminan en aborto inducido.
-Cada año, 14 millones de mujeres adolescentes dan a luz, lo que corresponde al 10% del total de nacimientos a nivel mundial.
-Cada año, a nivel mundial, aproximadamente 340 millones de personas son contagiadas de alguna enfermedad de transmisión sexual (ETS).
-En México la ETS más común es el Virus del Papiloma Humano, con 233 casos por cada 1000 habitantes.
-Alrededor del mundo existen un total de cerca de 31 millones de casos con VIH. En América del norte se han registrado alrededor de 860,000 de los cuales, 112,830 corresponden a México. En Sonora existen 1,726 casos registrados.

Con un bebé de brazos, una mujer muy asustada llega al consultorio de su ginecólogo y le dice:

Doctor: por favor ayúdeme, tengo un problema muy serio.
Mi bebé aún no cumple un año y ya estoy de nuevo embarazada.
No quiero tener hijos en tan poco tiempo, prefiero un espacio mayor entre uno y otro….
El médico le preguntó: Muy bien, ¿qué quiere que yo haga?
Ella respondió:
Deseo interrumpir mi embarazo y quiero contar con su ayuda.
El médico se quedó pensando un poco y después de algún tiempo le dice: Creo que tengo un método mejor para solucionar el problema y es menos peligroso para usted. 
 
La mujer sonrió, pensando que el médico aceptaría ayudarla.
Él siguió hablando: Vea señora, para no tener que estar con dos bebés a la vez en tan corto espacio de tiempo, vamos a matar a este niño que está en sus brazos.
Así usted tendrá un periodo de descanso hasta que el otro niño nazca.
Si vamos a matar, no hay diferencia entre uno y otro de los niños.
Y hasta es más fácil sacrificar éste que usted tiene entre sus brazos puesto que usted no correrá ningún riesgo.

La mujer se asustó y dijo: ¡No, doctor! ¡Qué horror! ¡Matar a un niño es un crimen!
También pienso lo mismo, señora, pero usted me pareció tan convencida de hacerlo, que por un momento pensé en ayudarla.
El médico sonrió y después de algunas consideraciones, vio que su lección surtía efecto.

Convenció a la madre que no hay la menor diferencia entre matar un niño que ya nació y matar a uno que está por nacer, y que está vivo en el seno materno.



¿Qué cambios debes hacer si estás embarazado(a)?